Surgen escalofriantes detalles sobre el asesinato estilo ejecución de estrella de TikTok en una sala de cine

Los fiscales y la policía revelaron esta semana más detalles sobre el tiroteo fatal de una estrella de TikTok y su amiga en un cine de Corona.

El tiroteo sorprendió a los fanáticos de Anthony Barajas y provocó mucho dolor. Barajas, un graduado de Mater Dei High School en Santa Ana, tenía casi 1 millón de seguidores en TikTok, que llegaron a conocerlo a través de sus videos de sincronización de voz, parodias con sus amigos así como reflexiones sobre las relaciones y las penas del corazón.

Muchas preguntas siguen sin respuesta, incluido el motivo del ataque.

Esto es lo que sabemos.

El tiroteo

Barajas, de 19 años, y Rylee Goodrich, de 18, estaban viendo “The Forever Purge”, una película de terror que presenta una noche de anarquía y asesinatos, el 26 de julio, cuando ambos recibieron disparos en la cabeza a manera de ejecución, según los fiscales.

El sospechoso, Joseph Jiménez y las víctimas no parecían conocerse, explicó la policía de Corona, quien describió los disparos como “un ataque no provocado”.

En una orden de registro obtenida por el Times, el detective de Corona Jason Goudy comentó que seis personas estaban en la audiencia para la película de las 9:35 p.m.

Jiménez, de 20 años, estaba viendo la película con tres amigos. Salió a la mitad de la misma, regresó con una bolsa e informó que tenía una pistola, según el documento.

Los amigos les indicaron a los investigadores que creían que Jiménez, quien estaba murmurando y hablando solo, había llevado un arma al cine.

Le mencionaron que tenían que ir al baño y luego abandonaron el sitio, de acuerdo con la orden judicial. Eso dejó solo a Barajas y Goodrich adentro con Jiménez.

Los amigos de Jiménez todavía estaban en el estacionamiento cuando lo vieron “salir corriendo del cine hacia su vehículo” para alejarse a toda velocidad, según el informe judicial.

Los empleados que fueron a limpiar la sala después de que terminara la película encontraron a “dos personas con una cantidad importante de sangre y no pudieron determinar si estaban vivas”, de acuerdo al documento judicial.

La víctima masculina tenía una herida de bala en la cabeza “con varios proyectiles alojados en la zona del cerebro”.

El sospechoso

Además de los dos cargos de asesinato contra Jiménez, se incluyen una circunstancia especial de homicidio múltiple así como la de estar al acecho porque se acercó sigilosamente y atacó a las víctimas, señaló el jueves pasado el portavoz del fiscal de distrito, John Hall, después de que se pospusiera la acusación de Jiménez.

Las imputaciones hacen que Jiménez sea elegible para la pena de muerte.

Entre los artículos que los detectives encontraron en un registro realizado a la casa de Jiménez una pistola Glock y la billetera de una de las víctimas.

En la entrevista en la cárcel, Jiménez le comentó a Press-Enterprise que se acercó a los jóvenes y le disparó primero a Barajas.

Goodrich “dio un salto”, y la baleó para luego salir corriendo de la sala, informó al periódico.

Jiménez, egresado de Santiago High School, comentó que, si pudiera revivir la noche del tiroteo, saldría del cine y no regresaría.

Ofreció “condolencias” a las familias de las víctimas.

“Ojalá no lo hubiera hecho”, expresó.

Jiménez le dijo al periódico que escuchó voces en su cabeza diciendo que sus amigos y familiares iban a ser asesinados.

Cuando se le preguntó si creía que matar a Barajas y Goodrich era la única forma de salvar a sus seres queridos, respondió: “Básicamente, sí”.

Jiménez explicó que recientemente le habían diagnosticado esquizofrenia pero que había dejado de tomar su medicación porque se le acabaron las pastillas.

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